La reconversión de los sistemas de depuración de aguas residuales surge de la necesidad de aprovechar las instalaciones existentes, para un proceso de depuración nuevo, más eficiente y optimizado, de forma a cumplir con los Valores Limite de Emisión (VLE) exigidos.
Permite aprovechar los recursos existentes y así minimizar el costo asociado a la intervención, obteniendo el desempeño operativo deseado al menor costo.
El proceso de rehabilitación de un sistema de depuración permite poner el sistema en funcionamiento al nivel de los parametros requeridos y la legislación aplicable.
Tras un diagnóstico inicial, se define el trabajo asociado a la intervención, permitiendo retomar el correcto funcionamiento de un sistema existente y/o mejorar su desempeño estructural y/o hidráulico con el fin de cumplir con los Valores Limite de Emisión (VLE) requeridos, la facilidad y flexibilidad de exploración y la longevidad de la instalación.
El UPGRADE de un sistema de depuración tiene como objetivo aumentar su capacidad en relación con al flujo/carga a tratar, así como su rendimiento frente a un conjunto de parámetros específicos.
El aumento de la capacidad de tratamiento del sistema debe ser estudiado y adaptado a la realidad de cada caso, así como a los objetivos de calidad establecidos, permitiendo así la máxima eficiencia del sistema.